lunes, 13 de abril de 2015

TIERRA SANTA en Uniclub, 11 de abril de 2015


Segunda presentación de los riojanos TIERRA SANTA en Argentina, más de una década después de la primera. Aquélla vez habían estado en El Teatro, tras la salida de su sexto disco, "Apocalipsis". Tras ello, mucha agua corrió bajo el puente para estos españoles, incluyendo un parate entre los años 2008 y 2010.

Desde nuestra humilde óptica, los últimos álbumes habían supuesto un cambio en el estilo de TIERRA SANTA, adaptando su sonido Heavy Metal hacia un Hard Rock más melódico y menos filoso. Pero por supuesto, estábamos convencidos de que en vivo, la banda sonaría tan pesada y compacta como antes de dicho cambio. Y no nos equivocamos.

Llegamos al Uniclub, un local que no conocíamos excepto de nombre, ubicado a un costado del Abasto de Buenos Aires, sobre la calle Guardia Vieja, a eso de las 20 horas. Al ingresar notamos de inmediato dos cosas: que el escenario estaba ubicado de espaldas a la calle, o sea al costado del ingreso, como en el extinto Hangar de Liniers; y que probablemente no iba a ser el lugar adecuado para el show, porque faltando una hora para que subiera la banda principal, ya casi no cabía nadie más.

Alcanzamos a ver el último tema de Patán, "El Auténtico Patán", los cuales nos impresionaron mejor que otras veces que los hayamos visto, con un sonido realmente óptimo.

Tras ellos, y con escasa pérdida de tiempo, apareció Renacer, la banda comandada por Christian Bertoncelli, quienes interpretaron una media docena de canciones. No estuvo aquí el sonido a la altura de las circunstancias, especialmente en cuanto a la voz de Christian, que salía bastante baja, siendo en muchos momentos tapada por los instrumentos. Y si en una banda en la cual el más destacado es el cantante a éste no se lo escucha bien, es obvio que la actuación se va a ver un tanto opacada. Pero por supuesto, la calidad de Renacer es alta, y por lo tanto salieron airosos del compromiso.

A eso de las 21 horas, con un local abarrotado y desbordado, comenzó la performance de los hispánicos. Incómodamente ubicados en las vallas, pero dispuestos a resistir allí, nos bastaron los primeros treinta segundos para darnos cuenta de que TIERRA SANTA sigue siendo TIERRA SANTA, pese a las palabras descreídas de antiguos fans que no comulgan con las últimas grabaciones.

Hoy en día la banda está constituída por dos miembros fundadores: el vocalista y guitarrista Angel San Juan, a quien tuvimos oportunidad de entrevistar hace días atrás, y el bajista Roberto Gonzalo. Junto a ellos, el baterista David Karrika, el tecladista Juanan San Martín y el integrante más reciente, el violero Eduardo Zamora. Precisamente a éste último le ha tocado la misión de reemplazar a otro miembro fundador, cual Arturo Morras. Y claro está que ha aprobado con creces el exámen.

El setlist elegido por los músicos se basó, como era de esperarse, en canciones de distintas épocas, varias de ellas regrabadas en su última producción discográfica, "Esencia". De tal modo, pasaron grandiosas piezas como "Apocalipsis", "Mi Nombre Será Leyenda", "La Sombra de la Bestia", "Juana de Arco", "Caminos de Fuego", "Pegaso", "La Momia", "Nerón", "Legendario" o "La Canción del Pirata", entre otras. Señores: no cabe duda de que estos temas están entre los mejores que se hayan creado dentro del Heavy Metal cantado en castellano.

Como les contábamos, nos pareció que el Uniclub no debió ser el lugar elegido para el show, pero a favor del local del Abasto debemos decir que TIERRA SANTA sonó realmente bien allí adentro. Lo bueno fue que tanto abarrotamiento de público contribuyó a crear un gran microclima interno, y lo malo fue que en otro lugar seguramente hubiésemos estado todos más cómodos (Inclusive los artistas, claro).

La performance de todos en el escenario fue buenísima. La banda funciona como un todo, no es un puñado de músicos virtuosos brillando cada uno por su lado. Angel San Juan es, por supuesto, quien ejerce el liderazgo, y en su voz y carisma se apoya buena parte de la propuesta del grupo. Tras él se encolumnan todos: Roberto Gonzalo es una enorme bestia de las cuatro cuerdas, transmitiendo pasión y fiereza en cada nota (Encima era al que más cerca teníamos, a menos de un metro). Juanan San Martín aporta excelentes climas con su teclado; David Karrika es un baterista poderoso, un motor para los temas; y finalmente Eduardo Zamora asume con simpatía y buena onda la responsabilidad de reemplazar a Arturo Morras: es un violero con muy buena técnica, y se hizo notar sobre el tablado. Chocó con el contratiempo de que se le cortara una cuerda cuando faltaba poco para el final. Fue en ese bache que Angel aprovechó para dialogar un poco con la gente, contando inclusive algún chiste, cosa que aclaró "no eran su especialidad"...

Fueron veinticinco títulos el total de los interpretados anoche, disfrutando a pleno la gente, prácticamente de principio a fin. No faltaron los reclamos de canciones no tocadas ("Drácula" se llevó el palmarés en ese sentido), pero tratándose de una banda con tantísimas excelentes composiciones como lo es TIERRA SANTA, es más que lógico que muchos temas de primera línea quedaran afuera. De todos modos, el acompañamiento de la gente fue intensísimo, coreando y cantando casi todos los temas, ofreciendo una inmensa calidez a los músicos.

A la salida, tuvimos oportunidad de dialogar unas pocas palabras con el líder, e inclusive pudimos tomarnos una foto con él. Cabe destacar su buena predisposición para charlar un rato con la gente y detenerse para las fotos, siendo que entre los fans que lo esperaban, había varias señoras (supuestamente bajo efectos etílicos), desaforadas y completamente fuera de foco. Bien por el artista, ignorando estas ridiculeces.

Para concluír: Uno de los mejores conciertos que hayamos visto en los últimos tiempos. La mejor prueba de esto es lo que mencionábamos más arriba: estuvieron a la altura de su anterior vista, la del año 2004, y eso no es poco decir, porque en aquél momento asistimos al mejor show de Metal en castellano de nuestras vidas!

Muchas gracias a Diego Perri, encargado de prensa, y a la gente de la productora Hellnoise, por su gentileza para con nuestro medio!

Comentario y fotos: Javier Sebastián Parente, para OXIDO.-